Casi tres mil personas resultaron heridas el martes por la explosión de numerosos aparatos de mensajes (beepers) en varios puntos del sur del Líbano, el oriental Valle de la Bekaa y los suburbios meridionales de Beirut, todas ellas regiones controladas por el grupo terrorista chií Hezbollah.
“Una gran cantidad de personas con heridas diversas están llegando a los hospitales libaneses y se ha descubierto inicialmente que las heridas están relacionadas con la explosión de aparatos inalámbricos en posesión de los heridos“, dijo el Ministerio de Salud Pública del Líbano en un comunicado.
El embajador de Irán en Líbano, Mojtaba Amani, resultó herido en la cadena de explosiones en varios puntos del sur del Líbano y Beirut, informaron medios iraníes.
El departamento gubernamental llamó a todos los hospitales en las áreas afectadas a que activen el nivel de “alerta máxima“ y se preparen para lidiar con una “necesidad urgente de servicios sanitarios de emergencia“.
“El Ministerio pide a todos los ciudadanos con aparatos de comunicación inalámbricos que permanezcan lejos de ellos hasta que se revele la verdad sobre lo que está ocurriendo“, agrega la nota.
El incidente masivo se produjo mientras el Gabinete de Ministros se encontraba reunido en Beirut, donde el primer ministro, Najib Mikati, pidió la inmediata salida del titular de Salud Pública, Firas Abiad, para lidiar con la situación, según un comunicado gubernamental.
Este es el primer incidente de este tipo desde que Hezbollah, aliado del grupo palestino Hamas, e Israel se enfrentan en duelos de artillería casi diarios tras el estallido de la guerra en Gaza hace casi un año.
Desde el Ministerio de Relaciones Exteriores del Líbano adelantaron que ya “se comenzó a preparar una queja que será presentada ante el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas” tras las explosiones de este martes, las cuales -asegura- fueron producto de una maniobra israelí.
Hasta el momento, la cartera de salud nacional informó de al menos nueve muertos y 2.800 heridos en este incidente.