El vicesecretario general de Hezbollá, Naim Qasem, afirmó este domingo (22.09.2024) que el movimiento islamista libanés, cuya ala militar es considerada terrorista por la Unión Europea, había entrado en una «nueva fase” en la batalla que libra contra Israel desde que estalló la guerra en la Franja de Gaza hace casi un año, y aseguró que la milicia se ha hecho «más fuerte”, pese a la seguidilla de altos cargos abatidos por Israel.
«Hemos entrado en una nueva fase», la del ajuste de «cuentas pendientes en la que continuamos la batalla de apoyo (a Gaza) y, de vez en cuando, los matamos desde donde esperan y no esperan», declaró durante el funeral de Ibrahim Aqil, jefe del cuerpo de elite Fuerzas Radwan, muerto el viernes en un bombardeo israelí. «Las amenazas no nos detendrán: estamos preparados para todos los escenarios militares» frente a Israel, añadió, en las que constituyen las primeras declaraciones oficiales de un alto cargo del partido después del ataque israelí.
Según las autoridades libanesas, al menos 16 miembros de Hezbolá murieron en este bombardeo, que mató a 45 personas en total, entre ellas civiles. El dirigente libanés acusó también a Israel de las explosiones de bíperes y walkie-talkies. «Israel cometió 3 dolorosos crímenes de guerra contra nosotros que representan los niveles más altos de brutalidad, de los que hemos sido testigos en este siglo y en el anterior. Atacaron a civiles, mujeres, niños, farmacias y hogares», indicó el alto responsable de la formación aliada de Irán.
«Habrá más desplazados”
Qasem afirmó que los ataques de su partido el domingo contra instalaciones de producción militar israelí y contra una base aérea del norte de Israel se inscribían en la fase del ajuste de «cuentas pendientes», y añadió que solo un alto el fuego en Gaza pondría fin a los bombardeos del movimiento proiraní, calificando «la solución militar israelí» de «dilema» para Israel y sus habitantes del norte. «Habrá más desplazados”, aseguró, en referencia a los miles de israelíes que han debido dejar sus hogares en las zonas fronterizas con Líbano.
Hezbollá abrió un frente en el sur de Líbano hace casi un año para apoyar a Hamás, en guerra contra Israel en la Franja de Gaza desde el 7 de octubre de 2023. Desde entonces, los intercambios de disparos en la frontera son casi diarios. La tensión aumentó significativamente en los últimos días, con intensos disparos entre ambos bandos durante el fin de semana, que hacen temer una guerra total.
Con información de DW