La Procuraduría de la Niñez y Adolescencia de Guatemala reportó hoy la recepción de 738 denuncias de violencia sexual contra menores solo en nueve meses, de enero al 30 de septiembre pasado.
Del ese total, 272 corresponden a violación, 424 a agresión sexual, 11 a delitos relacionados con la producción, posesión, comercialización o difusión de pornografía infantil, y 31 a trata de personas en la modalidad de explotación sexual, detalló la entidad.
Subordinada a la Procuraduría General de la Nación (PGN), la entidad explicó que su intervención se solicita cuando las niñas, niños o adolescentes carecen de representación legal o surge un conflicto de intereses entre ellos y sus representantes.
Los defendemos para que se garantice su atención, protección y resguardo, al velar por la restitución de sus derechos humanos vulnerados y a una reparación digna, acotó.
El departamento capital concentra la mayor cantidad de casos, precisó la Procuraduría de la Niñez y Adolescencia.
En esos nueve meses, amplió, recibimos a favor de las víctimas un monto económico de un millón 170 mil 132 quetzales (casi 230 mil dólares) en reparación digna derivado de denuncias anteriores.
Este flagelo dejó graves consecuencias para la salud y el bienestar de las niñas en el país, con dos mil 289 registros en 2023, un aumento contra el año anterior. El Observatorio de Salud Sexual y Reproductiva comentó que el problema no es la “maldad intrínseca” de los varones machistas, sino un comportamiento formativo milenario reiterado día a día.
Organizaciones locales lanzaron la campaña “Cuidemos a la niñez“, enfocada en concientizar a la población sobre la protección del abuso sexual infantil.
Expertos en el tema advirtieron que esas violaciones se dan en un alto grado de casos (alrededor de un 80 por ciento) en el seno familiar, con un pariente cercano o amigo implicado.
Informes oficiales estimaron en más de 50 mil los embarazos no deseados en niñas y adolescentes cada año en Guatemala.