La fiscal general de Guatemala, Consuelo Porras Argueta, celebró el jueves, con una rendición de cuentas, a la que el Ejecutivo se negó a asistir, el segundo año de su de su segundo periodo consecutivo al frente al Ministerio Público.
Porras aseguró que la ley se debe aplicar a todos sin importar su cargo, en un mensaje directamente dirigido al presidente, Bernardo Arévalo y a sus diputados aliados.
«Si bien hay algunas personas que no quieren ser investigadas, aquí la ley se cumple porque se cumple para todos y todas sin importar su cargo o condición», afirmó Porras al presentar el informe anual de gestión en un acto transmitido por redes sociales.
Todos «se deben someter al imperio de la ley», agregó con tono enérgico la fiscal.
El Ministerio Público ha pedido a la justicia retirar la inmunidad que ampara a Arévalo para poderlo procesar por su apoyo a la ocupación de violenta a la Universidad de San Carlos (USAC), por supuesto lavado de dinero del Movimiento Semilla, que lo llevó al poder y por otros presuntos delitos. La formación política de izquierdas fue suspendida por un juez a pedido de los fiscales.
El presidente de Guatemala carece de facultades para remover a Porras, sin embargo ha impulsado acciones en búsqueda de su destitución. El 6 de mayo, Arévalo entregó al Congreso un proyecto de ley para conseguir la remoción de la fiscal, quien en apego a la Constitución de la República de Guatemala tiene mandato hasta 2026.
